Última actualización 26/05/2023 por myspanishsoul
El paso del biberón a las papillas no siempre resulta fácil. ¿Con qué alimento empiezo? ¿Qué cantidades debo poner? ¿Hay algún alimento a evitar? Ya te contaba hace unos días a partir de qué edad nos recomendó el pediatra comenzar con las papillas. En este proceso de tránsito del biberón a la papilla, es importante observar las señales que tu bebé te va dando. Solamente así podrás saber si está preparado para dar el siguiente paso. Hoy te cuento todo lo que he aprendido sobre papillas de verduras. Pero también te adelanto algo sobre las de carne y pescado: ¿cómo, cuánto y cuándo? ¡Espero que te guste!
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Papillas de verduras
Entre el quinto y el sexto mes, puedes empezar con las papillas. La primera papilla de Mini C fue solamente con verdura, aunque con relativa rapidez le fui añadiendo otros alimentos. Te cuento las pautas que me dieron a mí aquí en Alemania: Puedes ir añadiendo pollo, ternera o pescado a las verduras poco a poco durante este periodo. Yo empecé con el pollo. Cocinaba al vapor unos cien gramos y de ahí me salían cinco raciones. El pollo lo mezclaba con verduras tipo zanahoria, apio, patata, calabacín, judías verdes. Le añades dependiendo de lo que tengas en la nevera.
Si necesitas un poco de inspiración, a continuación te dejo una receta que me facilitó mi pediatra para la primera papilla de verduras y carne de tu bebé:
Papilla de verdura y carne
- 100 gr. de verdura
- 50 gr. de patata
- 30 gr. de carne magra (sin grasa). Por ejemplo, ternera, cerdo, cordero, ave
- 1 cucharada de Rapsöl (aceite de colza)
- Media cucharada de zumo de fruta o puré de fruta como postre.
Esta receta la he adaptado un poco según lo que he ido investigando. Por ejemplo, intento no añadir más de 20 g de ternera, pollo o pescado por ración. El Rapsöl lo sustituyo por aceite de oliva. No suelo añadir patata a no ser que no vaya a congelarlo. La patata congelada queda con una textura grumosa. El cerdo aún no se lo he dado, aunque en teoría desde el quinto mes podría. Para el pescado utilizo un pescado blanco tipo merluza. ¡Ah! Y no le añado la cucharada de zumo de fruta ni suelo darle puré de fruta como postre. La fruta se la fui dando un poco después en la merienda.
Cada bebé tiene sus gustos, pero algo que parece generalizado es que, de primeras, no les atraen los sabores fuertes, prefieren los más neutros, por lo que yo me decanté por empezar con patata, zanahoria, la cebolla hervida le da un toque dulce a los purés y también les gusta bastante. Una vez introducidas, podemos ir variando y añadiendo otras, yo te recomendaría no mezclar demasiadas verduras en el mismo puré, porque sino, todos los sabores les van a parecer iguales.
Mi experiencia con las primeras papillas
A mí así me ha ido muy bien. Sí observo que la ternera le da mucho sabor a la papilla, por eso no le añado más de 20 g de carne a cada ración. Le voy alternando los distintos tipos de carne y el pescado para que coma variado. La verdura también se la voy alternando. En Alemania es típico añadir Pastinake (pastinaca) a las papillas de bebés. Yo no la había visto nunca, pero es una especie de zanahoria blanca y dulce. Si quieres, también puedes añadirle brócoli, Kohlrabi (colirrábano o colinabo según la traducción que he encontrado), calabaza y cualquier tipo de verdura que sea fácil de digerir.
En cuanto al pescado también puedes probar con salmón. De hecho en las papillas que ya vienen preparadas es el tipo de pescado que suelen tener aquí en Alemania. Bueno y nada de sal. Aunque te parezca aburrido de sabor, a tu bebé le gustará 😉 .
Yo estuve la primera semana alternando entre papilla de verdura únicamente y verdura con pollo. Después comencé a alternar la papilla de verduras con pollo con la de verduras con ternera. Por último y ya cuando tenía los seis meses, empecé a darle la papilla de pescado. En medio del proceso le empecé a dar papilla de fruta por las tardes. El resto de las comidas las hacía con leche de continuación. Más o menos comía cada cuatro horas.
Debemos tener en cuenta, a la hora de preparar las primeras papillas de verduras de nuestros pequeños, las últimas recomendaciones de la Asociación Española de Pediatría. Desde la AEP aconsejan que durante el primer año de vida no tomen espinacas ni acelgas. Y hasta los tres años, no superar los 45gr/día.
Esta recomendación se hace con el fin de reducir la exposición a los nitratos en niños menores de tres años. Los nitratos están presentes en estas variedades de hortalizas de hoja y el riesgo deriva de cómo el organismo de nuestros bebés metaboliza estos nitratos, ya que, al tener menos acidez en sus pequeños estómagos, pueden aumentar el crecimiento de microorganismos que convierten el nitrato en nitrito. El exceso de nitritos hace que el transporte de oxígeno a través de la sangre sea más difícil y puede producir metahemoglobinemia, que a su vez puede provocar cianosis.
¿Qué cantidad de papilla debe tomar?
En cuanto a la cantidad adecuada que debe tomar al comenzar con las papillas, la que Mini C se tomaba estaba en torno a los 100 g. La verdad es que en cuanto que notaba que no tenía más ganas tampoco insistía. Poco a poco fue comiendo más. Con cinco meses y medio se tomaba sobre los 200 g de papilla al mediodía y unos 100 g de papilla de fruta por la tarde. Cuando pregunté qué cantidad era la recomendada que comiera con su edad, el pediatra me respondió que cada bebé es diferente. No hay una cantidad reglada según la edad. Lo importante es que el bebé continúe creciendo y, por lo tanto, subiendo de peso de manera normal. Si esto sucede es que está comiendo la cantidad adecuada.
¿Y los cereales?
Cuando fuimos a la revisión del pediatra de la U5 (Untersuchung 5), le expliqué qué tal me iba con la alimentación. Entonces me comentó que ya podía comenzar a darle cereales por la noche. Una cosa que me llamó la atención es que en España suelen recomenzar empezar con cereales sin gluten.
Aquí el pediatra me dijo que no era necesario. Es decir, que podía comenzar a darle cereales con gluten a partir del séptimo mes. Le comenté que en España se solía empezar más tarde y me mencionó que en Alemania antes también. Y que piensan que el aumento de las intolerancias al gluten que hay, puede ser debida a que se empieza demasiado tarde con el gluten. Yo la verdad es que no sé que es lo mejor. Sin embargo, tras comentarlo en casa, decidimos comenzar con cereales con gluten.
¿Leche de vaca antes del año?
Otra cosa que me llamó la atención, es que el pediatra me comentó que le podía mezclar los cereales con leche de vaca en lugar de con agua o leche de fórmula. (Sí, aquí te indican en las cajas de cereales cómo prepararlas solamente con agua. Acabo de descubrir que en España es únicamente con leche). También puedes diluir la leche de vaca en agua y mezclarla con los cereales. Lo que sí me aconsejó, es hervir la leche antes. Comprar leche biológica y no darle más de 200 ml de leche de vaca diaria. En las instrucciones sobre cómo preparar los cereales te suelen decir la forma de hacerlo.
¿Y qué cereales?
A Mini C el tema de los cereales no le convencía nada. Además, aquí no se suelen dar en biberón sino en forma de papilla. La razón que he encontrado para ello es que darle los cereales en biberón aumenta la probabilidad de caries si eres de las que dejas al bebé con el biberón un poco a su antojo. Si estás pendiente de quitarle el biberón cuando haya terminado no debería de suponer ningún problema.
Yo he probado varias marcas. Comencé con la de Alnatura, después con este de Koelln y también con los de Aptamil, que es la marca de la leche de continuación que compramos. Aptamil es Almirón es España. Esta última es la que más le gustaba a Mini C. Una amiga me habló de Holle, una marca que usa muy poco azúcar en sus alimentos. Así que la he probado y por lo pronto está funcionando. Mini C se la toma estupendamente. ¡Esperemos que le dure!
¿Qué he utilizado para iniciarme con las papillas?
Para iniciarte con las papillas necesitas poco, te diría que realmente todo lo que tienes en casa te va a servir. Aun así, yo utilicé estas cucharas de Nuby, que puedes encontrar en Amazon España. Son muy prácticas, ya que la parte de color cambia a blanca si la comida está demasiado caliente. Se pueden lavar en el lavavajillas y están libres de BPA. Son aptas para bebés a partir de los cuatro meses y protegen sus encías. Empecé con unas más blandas y anchas, pero una amiga me recomendó estas después y la verdad es que me gustan más. Y mi segunda recomendación sería el babero con mangas impermeable. es un material poco «plasticoso» y me encanta que sean con mangas, para no estar lavando continuamente. Sobre todo si dejas a tu bebé que vaya experimentando él solo con la cuchara.
Como en la entrada anterior sobre este tema, esta información sobre papillas de verduras, carne y pescado está recogida en In Form (Deutschlands Initiative für gesunde Ernährung und mehr Bewegung).
¿Qué te parece esta forma de empezar con las papillas? ¿Cómo lo has hecho tú? ¿Qué diferencias notas respecto a la forma de hacerlo en España?
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